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29.6.11

Fácil

Ni pestañeo para ganar trofeos.
Mi alma, estática controla el panorama,
Divaga entre sentimientos
y descubro en tu mirada
a quien llevas dentro:
te encuentro,
y aunque no quieras,
te dejo sonriendo
por que sabes que soy bueno.
Mi talento egocéntrico
compensa mi exagerada
carencia de maldade espiritual,
pues el nivel de paz
interior que tengo
es la pieza angular,
el pilar,
de mi posición como escritor,
la cima piramidal de mi persona.

21.6.11

Paseos

Acabo de pillar
un gran pellizco,
sigo lamiendo
el filo extremo
construyendo
un redondillo
abismo
gélido
de grandes
trozos verdes
y vírgenes.

Gérmenes
colocantes
que desestresan
y satisfacen.

Ahora
estoy viendo
mi paseo
desde la atura
de mis ojos:
chustas
de porros
de distintos
tipos
por todos
sitios,

amargadas
arrastrando
a sus hijos
al maléfico
internado.

He visto un bar
en el que está
tomando café
un chaval
cantándole
a su novia
un poema
a la oreja,
y el dueño
pidiéndoles
fuego
o una cerilla.

Las hendiduras
de la acera
por debajo.

El calor
de mi hoguera,
de mis camaradas
y de mis
zapatos,
pues llevamos
andando
un buen rato,
bolígrafo
en mano,

garabateando.
Preparando
al lector
de mi blog.

Mientras

Mientras tanto, en el antes de ahora, tengo un bolígrafo
que dibuja llanuras y prados bastos e insuperables
para sus pobres globos oculares, del humano
cuerdo, sano y bien peinado, y to lo que tú quieras,
pero corrupto y de ano desgarrado;
que cree que charlo, cuando, en realidad, le disparo.

¡Guapa!

Para vuestras majestades cariñosas y vuestra propia voluntad borracha y fogosa,
la verdad, lo hago de nuevo, susurrándooslo solos; concediéndome
el poder poseer vuestro precioso mojado y sediento agujero petrolero de mujer.



Mi cantidad

Compenso el aire viciado de este antro
con el humo de este canuto,
que, aunque me trabe la lengua,
yo me exprimo el jugo.

Lo pongo en la balanza
de peso y precio,
y hasta las cifras riman
de tan incalculables que son;

se lo endiño al público
como si de un par de sables
se tratase,
corto en seco el viento
que frenó para escucharme
y purificarse.

Desganao

Las agujas nunca paran.
Estoy de resaca en la playa.
No consigo alcanzar mi destino:
el trabajo, que pestiño,
bueno, no está tan mal
ser un furtivo fugitivo,
el inconveniente es que no está
Dani aquí conmigo.